Ver para Creer
Del 31 de mayo al 16 de septiembre, 2018
La exposición presenta una antología de obras del artista visual poblano que cubren el periodo 1966-2018, es decir, pueden verse trabajos realizados desde la infancia de su autor. En el principio, en la adolescencia, el artista comenzó a dibujar y a pintar mientras se sobreponía a un periodo de enfermedad; desde entonces, la trayectoria de Antonio Álvarez ha sido constante.
En esta ocasión Capilla del Arte UDLAP invita a Erik Castillo, uno de los curadores e investigadores de arte mexicano contemporáneo más importantes e influyentes del país quien realiza la investigación visual de esta exposición y reúne 113 obras de arte de diversos formatos realizadas en los últimos cincuenta años. Se podrán apreciar cuadernos de artista, dibujos, gráfica, ensamblajes, pintura y un pequeño gabinete de curiosidades donde el visitante podrá encontrarse con diversos objetos que forman parte de la inspiración del artista antes de comenzar una obra de arte.
El acomodo de las piezas en exhibición no es cronológico y está organizado en trece apartados museográficos breves que se encuentran vinculadas las diferentes etapas como artista que dan cuenta de las horas de trabajo que el artista ha invertido en su formación y consolidación de un lenguaje artístico único y original. Delirando con la terminología, puede decirse que el artista personalizó su referencia neomexicanista a los temas relacionados con la identidad, creando un arte pop neo-novohispano. Dentro de las características que definen el estilo o estética de Álvarez Morán, a través de las últimas tres décadas de producción artística, las más evidentes son: el sentido del humor, la tensión entre lo sacro y lo profano, el cruce entre la psicodelia urbana y el mundo tradicional, la desfronterización de la Industria del entretenimiento respecto a la Historia del arte, la paradójica combinación de la síntesis minimalista con la complejidad barroca, entre otras.
Antonio Álvarez Morán estudió Artes gráficas y se graduó en 1982 de la UDLAP y fue profesor de tiempo completo del Departamento de Artes Plásticas de 1991 al 2016. Aficionado de las historietas, objetos, imágenes religiosas y cultura pop. Ha pintado diversos murales en la región; el más famoso le llevó 10 años concluir y es el que le da el nombre al restaurante que se encuentra en el Centro histórico de Puebla “El Mural de los Poblanos”, donde ha conseguido exhibir dos murales más que ilustran escenas de la identidad mexicana como “El mural del 5 de mayo” y “El mural de los dichos mexicanos”, este último se podrá ver en esta exposición. Su lenguaje pictórico ha conseguido distinguirse entre todos los artistas de su generación creando la técnica del “alvarezado” que se encuentra en sus pinturas; esta técnica fusiona el óleo con el collage de imágenes, frases o letreros de la cultura popular mexicana. A partir del 2011 trabaja en el proyecto Engaño colorido, reinterpretando el arte colonial mexicano. A la fecha cuenta con participación en 53 exposiciones individuales y 89 colectivas nacionales e internacionales.
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