Karla Bravo Altamirano
Oradora invitada - EDEC

79° CEREMONIA DE GRADUACIÓN DE LA GENERACIÓN 2023
10 de junio de 2023

Muy buenos días a todos los aquí presentes en la ceremonia de graduación de la escuela de ciencias de la UDLAP, mi alma mater.  Me siento feliz y sumamente honrada de poder compartir con todos los graduados, además de sus familias y profesores este momento tan especial y único en sus vidas. Me comentaba la Dra. Cecilia Anaya que este año la UDLAP esta graduando a la generación más grande de la historia de la Universidad.  

Decidí centrar mi discurso en una anécdota personal en torno al campo de las Ciencias. Me remonto a diez años atrás, a junio del año 2013, cuando tuve la oportunidad de representar a México en la Conferencia de Premios Nobel en la cd de Lindau, en Alemania. En ese año el tema central fue la Química. Durante el evento escuche a varios premios Nobel compartir con jóvenes de todo el mundo anécdotas personales y profesionales. Alguien que marco mi vida fue la Dra. Ada Yaneth, química israelí, ganadora del premio Nobel de Química en el año 2009 por sus estudios cristalográficos sobre la estructura de una molécula tan compleja y crucial, el ribosoma, el cual es uno de los principales blancos bacterianos para el desarrollo de antibióticos. Ella relato como se encontró con tantas reacciones de incredulidad e incluso burla en la comunidad científica, a las cuales ella hizo caso omiso, enfocando su energía en perseverar por décadas en su investigación y al mismo tiempo en convencer a la gente de permitirle continuar con su trabajo. Esta es una historia muy inspiradora con la cual yo, al igual que muchos de ustedes se identificarán.

Hay cuatro puntos importantes para mí que quiero compartir el de de hoy con ustedes: - el primero es la imperfección; creo que es bastante preciso decir que en la ciencia se falla más de lo que se acierta, para mí esto ha sido un gran aprendizaje de vida. No es humano lograr la perfección, más si lo es sobreponerse a las casualidades y perseverar en nuestro camino. El segundo punto es alrededor del trabajo en equipo, la inclusión y la diversidad; pienso que el reconocer y resolver los problemas más significativos de la humanidad es una tarea que solo se logra trabajando en equipo y particularmente, con equipos diversos en género, formación, localización geográfica, y, por ende, pensamiento en general. Aquí me gustaría enfatizar que un rol critico que jugamos actualmente las mujeres profesionistas en los campos de ciencia e ingeniería es el de inspirar a otras mujeres a perseguir este tipo de carreras, que sin duda son muy divertidas y gratificantes. El tercero es enfatizar que cada uno de ustedes es único y todas las experiencias que van acumulando en sus vidas, incluyendo las no tan placenteras, los está formando y les permitirá, muchas veces sin que ustedes lo perciban, desarrollar al máximo su potencial. Y finalmente, mi último punto es el servicio pues debemos tener presente que nuestra misión como seres humanos no es únicamente obtener beneficios personales y económicos, sino servir al prójimo y aportar a la comunidad.

Agradezco una vez más a mi alma mater el haberme impulsado a lograr mi sueño de ser investigadora y el permitirme celebrar con ustedes el día de hoy. Muchas gracias.