Siempre es recomendable realizar un respaldo de la información más importante, tanto de tus equipos como de documentos físicos, ya sea en la nube o en dispositivos externos. Por lo anterior, y para agilizar esta tarea, te recomendamos considerar respaldar:

Correos electrónicos: Recuerda siempre mantener un respaldo de tu correo electrónico, además de purgarlo y archivarlo como ejercicio periódico, sin importar que aún cuentes con suficiente espacio en tu buzón.

Facturas y recibos: Te recomendamos que conserves una digitalización para aquello que tiene garantía o simplemente para realizar un cambio o devolución, incluso puedes ordenar estos documentos por carpetas y tenerlos a la mano más fácilmente.

Documentos oficiales: Como parte de las recomendaciones de las mochilas de emergencia, es necesario tener a la mano los papeles más importantes de identidad, seguros, escrituras, etc. No olvides tener una copia digital de todos ellos.

Fotos y videos: Los grandes momentos del año, las reuniones familiares, las tareas de evidencia de tus hijos, tus videos de la maestría, toda esa información, organízala por vigencia e importancia, y respáldala.

Favoritos: Al navegar por internet y encontrar información útil e interesante, nos es muy fácil agregarla a la sección de “Favoritos” o “marcadores”, pero al cambiar de equipo podrías perder todas estas referencias, por esto, no olvides incluirlas en tu respaldo.

Contactos calendarios y notas: Post-its con teléfonos y direcciones, papelitos con notas relevantes, tarjetas de servicios confiables, fechas importantes, entre otros, son información que podrías tener al alcance de tu mano una vez que le dediques tiempo a subirla primero a las herramientas de mensajería y posteriormente asegurarla al incluirla en tus respaldos.

Trabajos y documentos: Lo más importante, posiblemente como resultado de tu día a día en el trabajo: reseñas, informes, reportes, códigos, y más. Siempre mantén una copia de estos documentos y archivos, y no olvides actualizar la tabla de en dónde los dejaste, para poder ubicarlos fácilmente.

Finalmente, considera siempre mantener la información sensible o confidencial protegida de una forma adicional, a través de un cifrado o contraseñas, además de mantener tus respaldos de información en un lugar seguro y confiable.

Contar con una cultura de seguridad informática es muy importante para las organizaciones y los individuos.